La música está siempre en constante cambio y el género del reggaeton no ha sido una excepción pues ha trascendido a través de varias décadas...
La música está siempre en constante cambio y el género del reggaeton no ha sido una excepción pues ha trascendido a través de varias décadas transformándose en lo que conocemos hoy. Y es que el género, a pesar de que algunos detractores lo cataloguen de “ser siempre lo mismo”, actualmente dista mucho de lo que era antaño.
Con orígenes en la década de 1990 el reggaeton ha conquistado los sentidos rítmicos de todo el planeta. Difícil es hoy día no haber escuchado un reggaeton, pues habría que vivir debajo de una piedra.
Un género que es también odiado injustificadamente por aquellos que no quieren mezclarse entre las multitudes, no vaya a ser que pierdan su condición de alternativo. Incluso algunos llevan anunciando su muerte desde los primeros hits, a pesar de ello, el reggaeton sigue más vigente que nunca, acumulando éxitos en multitud de países.
El origen no fue un camino de rosas, pues sus raíces provienen de barrios marginales lejos de los lujos y con un contenido lírico muy diferente de lo que suena hoy día.
Sus inicios se remontan a raíces marginales que buscaban expresarse y escapar del entorno frustrante en los barrios bajos de Puerto Rico. Por lo que fue una válvula de escape para los artistas que encontraron en este género una manera de manifestar sus ideas. A través del ritmo sincopado de una caja electrónica y acompañado de sintetizadores, se fue fraguando un género que incorporaba influencias del hip-hop y el reggae en español.
En los tiempos en los que no se conocía como tal, sino underground, trataban gran variedad de temas, entre ellos abundaban los que criticaban el malestar de la población puertorriqueña. También existían los temas sexuales, la violencia en las calles, la delincuencia y la opresión. Aunque algunos de estos temas más controvertidos hoy parecen que se hayan diluido, también existen, aunque no gozan de tanta popularidad.
En los noventa se acuña el nombre de reggaeton entre Daddy Yankee y DJ Playero y comienza a popularizarse en los barrios puertorriqueños. Apenas comenzó y ya estaba siendo considerado como un enemigo a combatir, por sus líricas explícitas, su baile, que expresaba la liberación del cuerpo y que venía a romper tabúes respecto al sexo. Sucedió al igual que otros géneros que también recibieron fuertes criticas por salirse del orden establecido y de lo “correcto”.
Desde el lanzamiento de “La Gasolina” comienza la primera oleada de expansión del reggaeton, pues también tuvo una pequeña ralentización en la que muchos cantantes decidieron diversificarse tomando sonidos más pop. Por lo que hubo un momento en el que, sin dejar el reggaeton de lado, eran estas canciones las que sonaban en el mundo. A costa de ello surgieron otros géneros como el electro-latino, que tiene sus raíces en el reggaeton. Prueba de esto son las canciones como Limbo o Danza Kuduro, que a pesar de lo que pueda parecer a los ojos de un inexperto, no son reggaeton.
Durante esta época muchos artistas que hoy hacen orgullosamente reggaeton renegaban de esa etiqueta, pues a pesar de su aceptación más extendida, no querían que fueran considerados con la mala crítica del reggaeton, pues era considerado como un género de mal gusto.
Esta ralentización solo sirvió para entrar de nuevo con mucha más fuerza con una segunda ola de expansión del reggaeton, que a raíz de nuevos géneros en la música urbana como el trap latino o incluso nuevos exponentes, pudieron apoyarse para resurgir otra vez en los equipos de sonido de todo el mundo. Una expansión más internacional que consigue poner en boga de nuevo el género.
El reggaeton no es solo lo que se escucha en la discoteca, pues hay mucho más detrás. Hay piezas musicales de todo tipo y muy elaboradas a nivel de lírica y producción. Es una cultura, un género ya consolidado que contiene a su vez cantidad de subgéneros y que merece que se trate como tal. Es hora de dejar de un lado las opiniones sesgadas, basadas en principios de superioridad cultural y sin ningún fundamento. Lo quieran o no, el reggaeton es música que ha llegado para quedarse y no parece que por poco tiempo.
Siempre ha existido la marginación de otros géneros durante la popularización que hoy son considerados de culto. Con el reggaeton esta criticas parece haberse ido reduciendo con el paso del tiempo, pero aún existen.
Por suerte, parece que ya va empezando a calar el mensaje, pues al menospreciar los gustos musicales de los demás, lo único que consiguen es quedar como unos pollaviejas. Cuando se habla de gustos, se habla de libertad de elección por lo que va siendo hora de dejar a los demás decidir que les gusta y en este blog podemos decir orgullosos que nos gusta el reggaeton.
Que sigan criticando sin piedad y continúen perdiendo el tiempo, que el reggaeton seguirá creciendo y aquí estaremos para contarlo.
Con orígenes en la década de 1990 el reggaeton ha conquistado los sentidos rítmicos de todo el planeta. Difícil es hoy día no haber escuchado un reggaeton, pues habría que vivir debajo de una piedra.
Un género que es también odiado injustificadamente por aquellos que no quieren mezclarse entre las multitudes, no vaya a ser que pierdan su condición de alternativo. Incluso algunos llevan anunciando su muerte desde los primeros hits, a pesar de ello, el reggaeton sigue más vigente que nunca, acumulando éxitos en multitud de países.
El origen no fue un camino de rosas, pues sus raíces provienen de barrios marginales lejos de los lujos y con un contenido lírico muy diferente de lo que suena hoy día.
Los orígenes del reggaeton
"Cada cual HABLE, de aquello que SABE, y en lo demás se CALLE" dice el refrán. Estemos de acuerdo o no, para criticar el reggaeton hay que conocerlo. Un pequeño recorrido por su historia ya nos deja entrever el porqué de su razón de ser.Sus inicios se remontan a raíces marginales que buscaban expresarse y escapar del entorno frustrante en los barrios bajos de Puerto Rico. Por lo que fue una válvula de escape para los artistas que encontraron en este género una manera de manifestar sus ideas. A través del ritmo sincopado de una caja electrónica y acompañado de sintetizadores, se fue fraguando un género que incorporaba influencias del hip-hop y el reggae en español.
En los tiempos en los que no se conocía como tal, sino underground, trataban gran variedad de temas, entre ellos abundaban los que criticaban el malestar de la población puertorriqueña. También existían los temas sexuales, la violencia en las calles, la delincuencia y la opresión. Aunque algunos de estos temas más controvertidos hoy parecen que se hayan diluido, también existen, aunque no gozan de tanta popularidad.
En los noventa se acuña el nombre de reggaeton entre Daddy Yankee y DJ Playero y comienza a popularizarse en los barrios puertorriqueños. Apenas comenzó y ya estaba siendo considerado como un enemigo a combatir, por sus líricas explícitas, su baile, que expresaba la liberación del cuerpo y que venía a romper tabúes respecto al sexo. Sucedió al igual que otros géneros que también recibieron fuertes criticas por salirse del orden establecido y de lo “correcto”.
La expansión y la actualidad
Con este origen musical proveniente de siglos de intercambios musicales, empieza a consolidar una robusta conexión con el público que continua hoy día. La masificación y popularización del género, provoca que éste empiece a moldearse y adaptarse a un público más desclasado. De repente, todo aquel artista que lo criticó, abandona su género para imitar a los reggaetoneros y conseguir remontar de su fracaso.Desde el lanzamiento de “La Gasolina” comienza la primera oleada de expansión del reggaeton, pues también tuvo una pequeña ralentización en la que muchos cantantes decidieron diversificarse tomando sonidos más pop. Por lo que hubo un momento en el que, sin dejar el reggaeton de lado, eran estas canciones las que sonaban en el mundo. A costa de ello surgieron otros géneros como el electro-latino, que tiene sus raíces en el reggaeton. Prueba de esto son las canciones como Limbo o Danza Kuduro, que a pesar de lo que pueda parecer a los ojos de un inexperto, no son reggaeton.
Durante esta época muchos artistas que hoy hacen orgullosamente reggaeton renegaban de esa etiqueta, pues a pesar de su aceptación más extendida, no querían que fueran considerados con la mala crítica del reggaeton, pues era considerado como un género de mal gusto.
Esta ralentización solo sirvió para entrar de nuevo con mucha más fuerza con una segunda ola de expansión del reggaeton, que a raíz de nuevos géneros en la música urbana como el trap latino o incluso nuevos exponentes, pudieron apoyarse para resurgir otra vez en los equipos de sonido de todo el mundo. Una expansión más internacional que consigue poner en boga de nuevo el género.
La crítica omnipresente
El género a pesar de contar con un pavimentado recorrido y haberse estabilizado en la sociedad sigue sin haberse correspondido con el respeto que merece en la actualidad. Pues sigue habiendo sectores de la sociedad en la que existe cierto clasismo cultural hacia lo popular. Parecen tener un complejo de superioridad que solo les deja criticar y criticar sin atener a razones.El reggaeton no es solo lo que se escucha en la discoteca, pues hay mucho más detrás. Hay piezas musicales de todo tipo y muy elaboradas a nivel de lírica y producción. Es una cultura, un género ya consolidado que contiene a su vez cantidad de subgéneros y que merece que se trate como tal. Es hora de dejar de un lado las opiniones sesgadas, basadas en principios de superioridad cultural y sin ningún fundamento. Lo quieran o no, el reggaeton es música que ha llegado para quedarse y no parece que por poco tiempo.
Siempre ha existido la marginación de otros géneros durante la popularización que hoy son considerados de culto. Con el reggaeton esta criticas parece haberse ido reduciendo con el paso del tiempo, pero aún existen.
Por suerte, parece que ya va empezando a calar el mensaje, pues al menospreciar los gustos musicales de los demás, lo único que consiguen es quedar como unos pollaviejas. Cuando se habla de gustos, se habla de libertad de elección por lo que va siendo hora de dejar a los demás decidir que les gusta y en este blog podemos decir orgullosos que nos gusta el reggaeton.
Que sigan criticando sin piedad y continúen perdiendo el tiempo, que el reggaeton seguirá creciendo y aquí estaremos para contarlo.
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